jueves, 26 de julio de 2012

talvez en primavera...


Talvez en primavera.
Deja que pase esta sucia estación de hollín y lágrimas
  hipócritas.
Hazte fuerte. Guarda miga sobre miga. Haz una fortaleza
  de toda la corrupción y el dolor.
Llegado el tiempo tendrás alas y un rabo fuerte de toro o
  de elefante para liquidar todas las dudas, todas las
  moscas, todas las desgracias.
Baja del árbol.
Mírate en el agua. Aprende a odiarte como a ti mismo.
Eres tú. Rudo, pelado, primero en cuatro patas, luego en
  dos, después en ninguna.
Arrástrate hasta el muro, escucha la música entre las
  piedrecitas.
Llámalas siglos, huesos, cebollas.
Da lo mismo.
Las palabras, los nombres, no tienen importancia.
Escucha la música. Sólo la música.



Blanca Varela, "Como Dios en la nada", antología