martes, 19 de abril de 2016

mi deseo es inhumano...



“Busco una forma definitiva, un estilo simple y correcto de decir las cosas. Esto me enerva. Es como mi imposibilidad de encontrar una lapicera exactamente apta al movimiento de mi mano. A veces creo encontrarla pero me sirve por muy poco tiempo. El mismo problema con los cuadernos, con las hojas. Mi deseo es inhumano: busco una continuidad absoluta. Lo único continuo en mí es mi deseo de esta imposible continuidad…

Estoy anómalamente fragmentada. Por eso mis pequeños poemas. El aborto es mi emblema, mi emblema de bordes mordidos. Todo esto puede derivar muy bien de la impaciencia. Imposible amar la tarea presente, hay un perpetuo anhelo de finales rotundos, muerte y resurrección. No el aborto sino el suicidio. Sólo salva el interés sostenido, presente. Al menos es lo que se dice. Yo no tengo tiempo, algo me precipita todo el día. Cuando nada me precipita entonces nada pasa. Soy una muerta.”







Alejandra Pizarnik, fragmentos del 6 de marzo 1964 en “Diarios”, Lumen



viernes, 15 de abril de 2016

donde hubo una espera ya no hay nada


Donde hubo una espera
ya no hay nada;
mi perro me ha enseñado a morir.

Nunca escribí su nombre,
hoy tampoco lo escribo.
Él no podía decirlo
y lo borró con él.

La lámpara apagada
tiene una claridad
que redime el engaño
del azar de encenderse.

¿Adónde llega todo
si nada lo recibe?

Casi sin darme cuenta
he encendido una luz
sobre el foso cubierto
mientras un hueco nuevo
que apenas se nota
muerde algo más el sueño
de creer que vivimos.



Roberto Juárroz, Poesía Vertical, 92 - XIV










domingo, 10 de abril de 2016

tienes la vida por delante...


            hoy es carnaval
            y yo tengo diez y nueve años dos amores mil libros y una
foto de Picasso
            pero hoy se me cae el llanto al vacío
            porque pienso en la vida

Alejandra, preguntáronte “cómo te trata la vida”. Tú dijiste:
No la conozco.


……


Futuro

me dicen
tienes la vida por delante
pero yo miro
y no veo nada




Alejandra Pizarnik, fragmento de 1956 en "Diarios", Lumen, 2003







viernes, 1 de abril de 2016

nena nadie te va a hacer mal... excepto amarte


Te doy pan, quieres sal,
nena, nunca te voy a dar
lo que me pides.
te doy dios, quieres más,
¿es que nunca comprenderás
a un pobre pibe?
Esas motos que van a mil,
sólo el viento te hará sentir,
nada más, nada más.
si pudieras olvidar tu mente
frente a mí,
sé que tu corazón
diría que sí.