jueves, 14 de octubre de 2010

una vez... la madre de Borges

"... Ella colaboró conmigo. Yo estaba dictándole un cuento que se titula "La intrusa". Y todo dependía de la frase en la cual el mayor le dice al menor que ha matado a la mujer. Yo no sabía como dar con esa frase. Mi madre estaba siguiendo el dictado, muy desagradada -vos siempre con tus guarangos y tus cuchilleros- pero había entrado en el cuento. Yo le dije: “ahora llega el momento... aquí esta toda la suerte del cuento. Depende de las palabras con las cuales el mayor le dice al menor que él ha matado a la mujer que quieren los dos”. Mi madre me dijo: “dejame pensar”. Y luego con una voz del todo distinta, agregó: “Ya sé lo que le dijo”. Como si hubiera ocurrido el hecho. "Bueno, escribílo entonces", le dije yo. Lo escribió y me lo leyó: “A trabajar hermano, esta mañana la maté”. Y ella encontró la frase. Y sin esa frase, que fue muy elogiada después, el cuento se hubiera caído a pedazos. Y era de ella. Luego me dijo: “Espero que ésta sea la última vez que tratás estos temas”. Claro, sí, porque a ella no le gustaban, le parecía que era absurdo todo eso. Además decía que todos los guapos eran flojos, que yo admiraba absurdamente a impostores."

"Borges el Memorioso- conversaciones de Jorge Luis Borges con Antonio Carrizo", entrevista radial en 1979, Buenos Aires, Argentina